Pandillas

Marisol Muñoz-Kiehne, PhD

Las pandillas son grupos que hacen pactos de lealtad para un propósito común que puede incluir cometer actos violentos y criminales. Tienden a organizarse según diferencias raciales o culturales, reclaman territorios, y adoptan nombres y apodos para sus miembros, quienes siguen un código de conducta definido.

Muchos muchachos se sienten atraídos o presionados a unirse a pandillas. Están más propensos aquellos quienes tienen problemas de comportamiento y aspiraciones bajas, y quienes viven en un ambiente familiar de descuido, conflicto o abuso, particularmente si existen pocas oportunidades educativas, recreativas, y vocacionales en su comunidad.

Los jóvenes se unen a pandillas en busca de amistades, de un sentido de pertenencia a un grupo, de protección si se sienten amenazados, y/o procurando mejorar su situación económica. Desafortunadamente, una vez se hacen miembros de pandillas involucradas en actos antisociales, tienden a descuidar sus estudios y pueden desarrollar adicciones, ser arrestados, encarcelados, lastimados o asesinados. Dadas las rivalidades entre pandillas, sus seres queridos también pueden correr peligro.

Prevención

He aquí unas guías, pues mejor prevenir que tener que remediar:

  • Hablarles desde pequeños sobre los peligros de la delincuencia
  • Mantener comunicación abierta y positiva
  • Discutir noticias, programas y películas sobre pandillas
  • Demostrarles interés en sus amistades y actividades
  • Apoyar sus metas y progreso escolar
  • Fomentar participación en artes, música, deportes
  • Sentar límites y normas de disciplina
  • Servir de ejemplo con actitudes y conductas
  • Aprender sobre las pandillas de su vecindario
  • Unirse a esfuerzos comunitarios pro oportunidades constructivas para la juventud, y contra la delincuencia y la violencia

Intervención

Muchos padres descubren tarde que sus hijos forman parte de una pandilla. Las siguientes señales de alerta no deben ser ignoradas:

  • Cambios en el comportamiento, incluyendo actitudes racistas
  • Ausencias a la escuela y poco interés por estudios
  • Amistades con miembros de pandillas
  • Ropa de cierto color, joyas y accesorios (cachuchas, pañoletas, cintos) relacionados a pandillas
  • Quemaduras y tatuajes (temporeros o permanentes) con símbolos de pandillas
  • Dibujos y números asociados a pandillas en libros, prendas, y paredes (grafiti)
  • Música, libros y revistas con temas de pandillas
  • Dinero o posesiones (teléfonos, “beepers”, armas) de origen sospechoso

Orientación

  • Consejeros y personal escolar
  • Terapistas y sicólogos clínicos
  • Agencias de servicios sociales para jóvenes y familias
  • Policía, alguacil y oficiales de probatoria juvenil

Procuremos información y orientación para la prevención, la intervención, o la sanación de las heridas que pueden causar las pandillas a nuestras familias y comunidades.